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Barranco de San Jerónimo (Tenerife)

De EnciclopediaGuanche

Chabocos en el Barranco de San Jerónimo

El Barranco de San Jerónimo es un barranco de la costa norte de la isla de Tenerife.

El Barranco de San Jerónimo tiene unos 9 kilómetros de recorrido. Nace cerca de la autopista TF-5, junto a la Montaña de la Retama, a 672 m. sobre el nivel del mar, en la Cordillera Dorsal (Barrio de Lomo Colorado); discurre entre pequeños núcleos de población dispersos pertenecientes al municipio de Tacoronte, uno de ellos, el barrio de San Jerónimo.

Es cuando pasa por las inmediaciones de Guayonge cuando se precipita bruscamente y con grandes saltos por una garganta muy estrecha, dentro del Espacio Protegido de la Costa de Acentejo. Desemboca en la Playa del Camello, abierta al Océano Atlántico y formada por grandes bloques de rocas.

El barranco de San Jerónimo tiene una gran importancia para el barrio porque era en su cauce donde se formaban los célebres Chabocos: cavidades naturales (huecos o hendiduras) producidas por efecto de la erosión que, cuando llovía, daban lugar a grandes charcos en los que se realizaban diferentes actividades como lavar la ropa, labor que realizaban las mujeres, lavaban en compañía de muchas otras y para entretenerse cantaban, se contaban chistes y hablaban de su día a día. Como se tardaba tanto, llevaban la comida para pasar el día lavando.

Constaba de tres fases: enjuague, enjabonado y aclarado. Se usaban piedras de jabón y gallinaza para quitar las manchas; y después del lavado, la ropa se dejaba secar encima de la vegetación o en las piedras del entorno. También eran utilizados como abrevadero de animales (o incluso, según la sabiduría popular, de personas, ya que el agua del barranco corría limpia cuando llovía y la que se quedaba en los charcos era potable.), etc. En algunas ocasiones se encauzaba esta agua hacia cultivos para su regado. El cauce también servía de lugar de juego y baño para los más jóvenes del barrio.

En épocas pasadas, el vecindario se encargaba de quemar la hierba para mantener el paso del barranco por el barrio limpio, creando sus propias escaleras de tierra para moverse a lo largo y ancho de su cauce. Del barranco también se extraía arena y revuelto de tierra y piedras destinado a la construcción de viviendas. El barranco también tiene importancia etnográfica, ya que, a través de la ruta de su cauce, subían las pescadoras de El Pris para intercambiar y vender alimentos.

Cuando cobraban gran importancia era en las Fiestas Patronales del barrio.

La celebración del Santo del Agua, como también se conocía popularmente a San Jerónimo, consta en el cuadrante de misas de Santa Catalina a partir de 1667, en cuyo año figuran como mayordomos de la ermita los ya mencionados Romelet y su esposa Isabel.


La fiesta que se celebraba en honor de San Jerónimo, al que llamaban popularmente "santo del agua", constituye un eslabón costumbrista y tradicional que en origen debió surgir una vez erigida la ermita. Era condición imprescindible que los chavocos se llenaran con las primeras aguas otoñales para llevar a cabo el festejo. Se reunían en torno a los grandes charcos cerca del barranco, representando obras teatrales y otras diversiones, destacando el arco que levantaban y aderezaban con frutas, panecillos de turrón y otras cosas, además de la llamada "torta del medio" como producto más codiciado. El reparto del arco era el número más esperado por todas las personas participantes: un individuo se encaramaba a lo alto y arrojaba con simulación y gestos engañosos los objetos que recogían los más habilidosos, y al final, la preciada torta del medio iba a parar a uno de los chavocos, donde los mozalbetes se la disputaban con alborozo y a riesgo de empaparse la ropa. La aparición de las primeras lluvias se consideraba como una señal de abundancia y premonición de buena cosecha, dada la importancia del medio agrario en aquellos tiempos. La tradición del festejo se ha perdido, aunque el reparto del arco se conserva y se sigue fomentando actualmente en la fiesta de San Juan, en el barrio de este nombre.